Es una entrada especial, quien les escribe habitualmente presentó certificado médico por gripe (o como quieran llamarle) y ante la necesidad de que atiendan el kiosquito mandó solicitada vía mail (mecánica similar al OpenModellbaus)...
En 15 minutos el Dr Gaucho Baus (así se presentó en guardia) se hizo cargo de la situación...
Los dejo en manos gauchas y me voy a comentar su nota como hijo de vecino...
Pininfarina Sigma
Parece ser que a fines de los sesentas, la cantidad de muertos en las carreras alcanzaba cifras alarmantes.
Y en 1968, la revista Automovil Revue lanzó una campaña para disminuir el peligro de la F1.
Pininfarina lo tomó como desafío personal, puso manos a la obra y creó el Sigma.
El auto ensayaba algunas técnicas de seguridad intuitivas, algunas en forma totalmente empírica.
Si bien no pasó de la fase de prototipo, el Sigma pasó a la historia como el primer F1 que priorizaba la seguridad del piloto.
Les mando dos fotos, pero si quieren más vayan al blog el infierno verde que tiene una nota muy interesante sobre este prototipo.
En Argentina no podíamos estar al margen de semejante movida.
Así surge el Sigma argentino, en escala similar a 1/32.
Otra diferencia importante es el alerón, que fue usado en otros modelos vernáculos.
Sé que hubo un F1 gordito, rechoncho, que usaba el alerón.
Ruedas y motor también fueron utilizadas en otros modelos.
Y seguro que el piloto también manejó otros autos.
El modelo consta de dos mitades (una superior y otra no) de plástico rígido pegadas entre si.
Entre carrocerías y accesorios, son 6 partes, sin contar ruedas y ejes.
Una cosa es segura:
este autito de plástico corrió más kilómetros en estas lejanas pampas que el original que jamás se usó para otra cosa que ocupar un lugar en un museo.
En efecto, cuentan los viejos que de pibes se organizaban épicas carreras en las veredas del barrio.
Disfruten los recuerdos que se acaban,
alzheimer viene cada vez más cerca.
Gaucho Man
el indeclinable
Es ahora que me doy cuenta de mi aristocrática infancia, que me la pasé pateando con desgano un Pininfarina Sigma...
ResponderEliminarA la muchachada casada, si ven uno de éstos tirados en el patio le dicen a su señora esposa... "Me alcanzás el Pininfarina Sigma?" Si se lo traen es por que sus mujeres me leen a escondidas...
Era un Sigma!!!! Y yo que pensaba que era un simple delirio de un fabricante jugueteril...
ResponderEliminarLa verdad es que no lo conocia o tal vez si y este alemán del que habla el Gaucho ya me alcanzó.
Como siempre, un post magnificent.
Felicitaciones Cabo a ud, y a su médico de cabecera, el Doctor Gaucho Baus.
Saludos!!!!
Un juguete que mucho me hubiese gustado tener..
ResponderEliminarSaludos !!
felicitaciones Gaucho por el posteo, le quedó una pinturita!!
ResponderEliminarCabo, disfrute de sus días de gripe
saludos a ambos
"mi juventud aparta el recuerdo de mi memoria." Vamos, que somos pocos y nos conocemos mucho.
ResponderEliminarFeo, con todo respeto.
Por un instante me hizo recordar a 'METEORO',época de la cual me contaron... ¬¬
ResponderEliminarP.D.:¡¡Que bueno debe ser tener asistentes gripales con semejante altura,eh?! ;)
Un MUY BIEN 10 FELICITADO para DON GAUCHO y en tecito con mil para DON CABO!!! :)
BESITOS ANTI GRIPALES
0800-GAUCHO "llame ya" fue urgente al rescate del enfermo. Con esos amigos, da gusto enfermarse.
ResponderEliminarY de regalo, presentando el famoso Sigma, un proyecto de F1, con el que jugamos en los setenta, y que se presentaba en nuestra imaginación como el futuro F1 del siglo XXI.
Por supuesto, ese auto es mucho más lindos que los F1 reales de estos años...
Abrazos!
PD: reposo y una copita de una bebida espirituosa por la noche, y el lunes amanecés hecho una pinturita. ¡Pipí-cucú!
No conocía el auto ni el juguete. Pero me parece un diseño soberbio, como no podía ser de otra manera viniendo de Pininfarina- . Que haya sido seguro además pareciera un plus, porque lo que llama la atención es su logradísima forma.
ResponderEliminarQue te mejores Cabo. Me hiciste acordar al capítulo del Zorro de la epidemia de sarampión, pero ahí fue Reyes el único que no se contagió.
Saludos, desde lejos por las dudas!
Así en modo general comento, es un honor tener al Gaucho de anfitrión, conozco su talento y bien podría no asombrarme.
ResponderEliminarPero invito a pensar, si me mostraban el austero móvil de plástico ni en mil años hubiera sabido que auto era... Y si me mostraban el auto jamás hubiera recordado ésta miniatura plástica.
Y por sobre todas las cosas una nota hecha con dos pesitos, quizá sea un llamado de atención, la demostración de que un modelo perfecto o la miniatura mas cara no reemplaza el valor de la palabra.
Hola Vasco.
ResponderEliminarEfectivamente, es un Sigma.
Lo que rescato es que el matricero o juguetero que se lanzó a hacer este modelo,
sabiendo que era un juguete para pibes,
sabiendo que hubiera podido hacer cualquier monigote que igual se iba a vender,
el tipo se largó a hacer un Sigma.
Quizá lo reconstruyó a partir de una foto, sin la información de internet que tenemos ahora, y por eso salió "tan argentino".
Pero el chango se largó a hacer un Sigma, que no es poco.
Eddie,
Los pueblos tienen los juguetes que se merecen.
Cada país tiene (o tuvo en su momento) su propia industria juguetera.
Acá tuvimos lo nuestro (que no duró mucho) pero seguramente tú tuviste lo tuyo, me gustaría conocer los juguetes que hubo en tu país en los sesenta/setenta.
Laura, gracias por comentar.
Para un forista consuetudinario, el blog con sus códigos y tiempos representó (y aún representa) todo un desafío.
Confieso que he venido, visto y disfrutado.
Si bien hay mucho que aprender aún, o quizá gracias a ello,
me van a tener que aguantar un tiempo largo.
Gracias otra vez.
Mostro, por favor no me deschave el dni de 16 millones.
Trate de imaginarme como un purrete que recién se asoma a la vida.
Total no le voy a cobrar por eso.
Hola Gabu.
La referencia con Meteoro es inevitable, por cuestiones temporales y temáticas.
Y seguramente en algún capítulo apareció algún bicho similar a este engendro.
El que no haya pensado en Meteoro que arroje el primer autito.
Juanh, yo sé que te gustó este bicho porque tiene un calco con el número.
La verdad es que el número es un aditamento argentino, no creo que el real haya tenido número.
Alumno Cruiser no sea mentiroso
Yo sé que usted ha jugado con sigmas a patadas,
lo que pasa es que se hace el desentendido para que nadie se ponga a sacar cuentas.
Y si quedaran dudas, esa referencia al capítulo del zorro con el cabo sano le deschava la mentira.
USTED ES MAS VIEJO QUE YO!!
Lo dije al fin.
Cabo, lo dejé para el postre.
En cuanto al autito, habida cuenta del carácter pluralista de este blog, traté de no enroscarme con algo muy específico y busqué "uno que sepan todos".
Y evité los tecnicismos porque sé que lo aburren pasmosamente.
Para mi fue un honor participar en este espacio,
con un plantel de larga data y muy copado.
Agradezco la posibilidad a Usted y todos los comedidos que me honraron/perdonaron con opiniones ran favorables.
Le deseo se reponga pronto
y sigo participando.
Excelente post "muleto". Felicitaciones para el Dr. Gaucho.
ResponderEliminarYo lamentablemente no llegué a jugar con el Sigma, pero si tuve cientos de kilómetros recorridos en el patio de la escuela y en el largo pasillo de mi casa, con F1 plásticos rellenos con toneladas de plastilina.
Misteriosamente en mi casa siempre desaparecían las cucharitas de café... serían duendes? (jeje)
Estuve 5 años buscando fotos de este autito que tuve en mi infancia, cuando tambien tuve 4 o 5 autitos de la linea de los Indycar, BRM, Lola, Ferrari tiburón, Honda y varios otros que venian de Hong Kong sobre matrices que hacía Revell-Monogram para el incipiente Scalextric. Algunos los conservé, otros quizás estén pero tendria que buscar y rebuscar más, pero siempre creí que el Sigma era de la serie de los de Hong Kong y ahora gracias a su post, se me clarificaron los recuerdos viendo las formas y sobre todo el color a crema americana y esas ruedas anchas que eran los pocos detalles que aún conservaba en mi memoria. Bue!! por fin ha terminado mi búsqueda. Con su permiso me bajé las imágenes para guardarlas en mi álbum digital junto con otras fotos de otros tantos juguetes que me hicieron la infancia feliz. Gracias Gaucho por su aportación que fue para mi, tan especial. Oliverio.-
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