Si preguntan por mi colección, debo decir incompleta, felizmente incompleta, si un día se completa no podría coleccionar más.
Conjugando modelos de factoría reciente y no tan nuevos, hasta llegar a antiguos con más de 50 años, vamos a repasar los autos que circularon por nuestras calles entre los años 1950 hasta entrados los 80´s, un legado humilde para quien me siga, o simplemente ir dejando huella...

domingo, 7 de junio de 2020

Jeep IKA Sabú Furgón (1965) La Planta de Café - Vehículos Inolvidables de Reparto y Servicio


Rediseñando el Jeep

De la mano de IKA el Jeep fué el primer utilitario de industria nacional, elemental por un lado y polivalente por el otro fué una gran acierto de parte de Industrias Kaiser pensando en el mercado local.
Usted podrá imaginar que por los 50s era tierra virgen y sobre un parque automotor escaso, pensar en un utilitarios, en el sentido que hoy se le da al término, era pensar en muy pocos vehículos con ése fin.

En ése contexto llega el Jeep, aquél vehículo rústico pensado para actividad rural y gente de buena salud que se aguante manejar expuesto a los elementos... Ya sea sol, lluvia, granizo, frío, calor, humedad y combinaciones felices de todo lo enumerado.

LOTE (sus): Terreno sin edificación o construcción alguna delimitado en su perímetro con escrituras a la venta.

Así como comprar un lote supone un proyecto sobre su uso posterior, el Jeep era la versión automovilística del lote. Era la base de un proyecto de vehículo, incluso hay una versión de Jeep Cargo que ni carrocería de Jeep tiene, una suerte de planchón con un asiento y motor.

En efecto, la utilidad del Jeep per se era limitada, oblar su costo para usarlo con su "confort" original no era la ecuación que mejor resultado daba y respecto a su "utilidad" también.

Así el Jeep fué la semilla para que se desarolle de forma paralela la industria carrocera, podía encontrar fabricantes como Facma, Rudal, Compreg y Mancar (por nombrar algunas) y dentro de ése grupo estaba la carrocera Sabú.
Nacerían versiones Pick-Up, Rural y furgón del Jeep dependiendo de la cabina añadida por la carrocera sobre las versiones corta y larga del Jeep IKA.

En el caso de Sabú la carrocería añadida era de chapa doble Nº18 (chapa gruesa) con perfilería para reforzar los laterales y techo bombé, no se abulonaban sino que se unían con soldadura.
Otro aspecto particular era lo modificación de las puertas laterales para darles mayor tamaño y un acceso a la parte de carga por la parte posterior mediante una compuerta simple de apertura lateral.

El respetable espesor de la chapa, sus refuerzos y la soldadura... Sabú más que un utilitario fabricaba un tanque de reparto.

Hoy se puede decir que la calidad del trabajo y los materiales empleados eran superlativos, las unidades sobreviventes sufren el paso del tiempo de manera pareja, como si hubieran salido así de fábrica.


Interesante el desarrollo para entender éste IKA Sabú, ahora sí le puedo decir: Mi principal impulso para adquirir éste modelo es el café.

No soy un jeepmaníaco, pero mi relación visceral con el café excede los límites del vicio.

Usted se preguntará por qué no colecciono café... Por que me lo tomo...

Otra afición que tengo es la gráfica de antaño, la cartelería antigua de puño y pincel, ése arte anónimo que daba uso de la belleza como principal atractivo y lograr su fin comercial.

Póngase una camisa blanca, un suéter de cuello V y arrímese (con un café en la mano) a la persona que tenga cerca a la tarde y dígale "Tengo afición... Por la gráfica de antaño... La cartelería antigua de puño y pincel... (Tome un sorbo de café) Ése arte anónimo... Que daba uso de la belleza como principal atractivo..."

Y después se raja! Se manda a mudar! Salga de escena! Por que si se queda la puede cagar como la cagó quien escribe.

Volviendo al modelo y su gráfica, déjese llevar por la letra C de la palabra café pasando detrás de las demás palabras. Note el contorno blanco que la resalta junto a las demás.

Luego en la parte inferior el romanticismo de la dirección en tipografía legible, clara, con efecto de sombra en color negro, toda una época fué así.

El uso de puntos para separar la información entre dirección, teléfono y localidad. Los puntos fueron un recurso valioso para reemplazar el espacio necesario entre los datos. Así en una distancia limitada (en éste caso el largo del furgón) se podía utilizar una tipografía más grande, la misma para ser separada por espacios, requería al menos un metro más de longitud.

Otro aspecto son los sintéticos números telefónicos de antaño, con varios dígitos menos (Y más fáciles de memorizar).

El tampografiado estuvo a la altura de la circunstacias, refleja el viejo modo de hacer las cosas de manera excelente.


Respecto al modelo es una nueva versión del Jeep más conocido en su parte delantera, rostro archiconocido que los modelistas de raza hacen con ojos cerrados. Junto al VW Beetle es uno de los modelos más populares y sirvieron de inicio a muchas colecciones.

Punto en común, vehículo omnipresente, no debe existir país alguno sobre la tierra que no tenga éstos vehículos en su parque automotor, si se le suma su longevidad y su uso recreativo se entiende como su existencia migró de vehículo militar a ícono pop.

Todos eruditos, podemos pasar a revisar la matriz que da sustento a las formas de la parrilla y los buches de los guardabarros delanteros, las ópticas y marcos de las mismas, su paragolpes espartano y parabrisas modesto.


El toque de calidad se logra con las luces de giro que son insertos y no pintados.

Asoman los elásticos de suspensión delanteros detrás de unas ruedas muy adecuadas. Representan llantas de chapa blancas con sutiles toques en negro para bulones y grasero al centro.



Espejos retrovisores de calidad suficiente para su categoría acompañan limpiaparabrisas extremadamente discretos, parecieran ser parte del parabrisas plástico, pero los reflejos sobre el mismo dan cuenta de que no son pieza aparte.

El detalle de la puerta que Sabú supo conceder a la unidad. Aquí es donde el "Manual del buen jeep a escala" deja de servir.
Todo lo que resta detrás de la línea del parabrisas es "Sabú a escala" salvo las partes bajas que sigue siendo Jeep.

Como detalle la matriz refleja la bagueta dibujando una Z sobre la puerta, la misma levanta la línea del capot hasta la línea de la nervadura posterior de la puerta.


Debajo de la puerta conserva el peldaño original, ahora que el Jeep tiene techo, el uso del mismo no es tan libre... No sin casco.

La carga de combustible sigue siendo la misma.

El ángulo con que remata la carrocería en la parte trasera es la original de Jeep y pensada para uso off road, el escape sale a una altura mayor en consecuencia, casi detrás del paragolpes.


Zoom permitido, pone en evidencia la tampografía de JEEP de manera óptima.


Hacia atrás el paragolpe trasero toman como base al delantero, digo como base ya que sobre el mismo tiene esos agregados, resulta lógico ese plus a la defensa ya que la carrocería está casi sobre la línea de la defensa.

Detalle de la matrícula a la izquierda, color naranja y previa a la normalizacion a negras. Al ser la unidad de Mar del Plata tuvieron el buen tino de elejir la Provincia de Buenos Aires.

Luces traseras simples como las del vehículo real, con esos insertos las resolvieron sin dificultad.


La tampografías siguen de nota alta y atrás dan su toque especial.


Llegamos a una visión completa de la parte posterior donde se aprecia la compurta trasera de apertura lateral que ofrecía Sabú con picaporte a la derecha atendiendo el sentido de carga y descarga cuando está estacionado.

El diseño es particular, la lógica indicaría que la parte posterior debería ser plana y no con un plano inclinado hacia su interior.

El origen de esa inclinación, lo más probable, sea por las ventanillas disponibles para la versión vidriada que eran las que usaban los colectivos de entonces y que tenían esa forma en su parte trasera.

Arriba el techo bombé en dos planos, gran detalle que deja adivinar como eran construidas éstas carrocerías, considerando que se ofrecían para Jeep corto y largo, el techo eran dos superficies de chapa que se deslizaban a la longitud requerida.


Y todo el trabajo sobre el Jeep redunda en ésta foto: Donde el interior es verdaderamente el interior.






Un modelo con atractivo múltiple, a quien lo adquiera por ser un Jeep le seguirá otro por amor a IKA, cuando no un sibarita por lo exótico que piensa en Sabú... También puede pensar en un sujeto amante del café... Ya conoce uno ahora.


Magníficent Jeep IKA Sabú!

17 comentarios :

  1. De los varios Jeeps que salieron, creería que este y el IKA a secas son los mejores, el blanco por toda la sencillez que muestra, y este por mostrarlo trabajando con mucha calidad (aunque, el de los bomberos está muy bueno también), me parece que la combinación de colores y gráficas, junto con un buen molde, hicieron que quede una excelente combinación, trataré, canje mediante, de conseguir alguno. Un mas que interesante magnificente. Saludos. Luis

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    1. Les salió muy bien el modelo, encontraron el utilitario y su uso sin caer en el facilismo de buscar en las Fuerzas Armadas por la simple razón de ser un Jeep.

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  2. Que buena reseña Cabo! Cuánta información sobre un tema que desconocía por completo, el modelo muy bonito también y las foto IMPECABLES. Muchas gracias, saludos. Carlos

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    1. Me tuve que informar un poco Carlos antes de hacer la nota y cuando se trata de industrias tan particulares como las carroceras se puso interesante el tema.

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  3. ¿Que buena miniatura! Soy de Mar del Plata y recuerdo una unidad como esta, haciendo reparto de café por la ciudad. Andaba circulando una foto (creo que salió en el fascículo que la acompañaba)de los tres vehículos que hicieron la tarea: la Sabú, la Estanciera y el furgón Citroën (la Citroneta). Y si tiene adicción al café, cuando ande por Mar del Plata peguese una vueltita por la dirección que figura en la miniatura y después me cuenta. se lo muelen a la vista. Saludos.

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  4. Así que era barista y me vengo a enterar por el blog. Somos colegas en dos hobbies entonces. La próxima visita a Cordoba me indica dónde lo sirven bien y lo invito!
    Ahh el Jeep..., cierto. Uno de los mejores, junto al IKA blanco de la otra colección. En cambio el carrozado corto de la Fuerza Aerea es olvidable, se les fue la mano con el voladizo trasero, una lástima.

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    1. Nonono... No soy barista, entiéndase café como brebaje, infusión, el precioso néctar negro.

      Gusto de catar cuanto café esté dando vueltas, premium o de venta masiva.

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  5. Siempre me gustó más esta versión carrozada con chasis largo que los alegres cortos descapotados.
    Tengo entre mis grandes frustraciones uno de estos con trompa extraída de un Bburago, que ahora que compre este Inolvidable, seguramente no terminaré jamás en mi vida.
    Es que lo veo demasiado bien hecho.
    Quizás por ser tan angular y cuadradote, y por delante tan universal, el chino no tuvo mayor dificultad y el resultado salió limpito.
    Le aseguro que no le encuentro ni una falla, quiero uno para mi.
    Le prometo un café para cuando nos encontremos.

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    1. Yo voy tomando nota de todos los que ofrecen café...

      Y termine de una vez su proyecto, alguna vez lo ví a ése Jeep a media faena... Amén de que hoy se vea opacado por los nuevos modelos tiene un singular detalle: Salió de sus propias manos, no muchos pueden hacer eso.

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  6. Añoro los viejos cafés del Microcentro, esos de barra larga dónde se tomaba un excelente expresos de parado. Y ahora con la cuarentena, mucho más. Es lo primero que voy. Hacer cuando se habilite, ir a lo de algún gallego sobreviviente y pedirme un "cortito" (nada de ristretto, eso lo dejo para cuando ando x la península..). El Jeep, impecable

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    1. No voy a negarle la experiencia placentera de tomar un café, aunque lo disfruto más en el ámbito hogareño, en donde uno puede tenerlo al lado mientras hace algo o piensa en algo.

      No sé si seré ansioso, pero me irrita el tiempo entre pedir un café y que me lo traigan, supongo que ser atendido, servido, suele ser placentero... Pero hay cosas como el café que prefiero hacerlo yo mismo sin intermediarios!

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  7. La verdad es que la primera vez que vi la miniatura no me pareció nada del otro mundo y la verdad es que viéndola al detalle y como tan bien lo relatas, tiene muchos detalles que hacen la miniatura muy especial, no vi la procedencia jeep hasta la foto del frontal, que como bien dices es inconfundible como otros clásicos de la historia del automóvil.
    Ahora ya tengo un mejor criterio de la miniatura, y acabo de aprender que hay que tomarse su tiempo, un buen café y fijarse con detenimiento en todo tipo de detallitos, Me ha gustado mucho.
    Un saludo!

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    1. Cuando salió ésta colección supuse muchos modelos así, reencuentro con marcas de antaño o viejas gráficas... Sin embargo no son los más dentro de la colección.

      Fueron en desmedro de vehículos militares, autos oficiales y algúna que otra unidad flotillera, una lástima...

      Siendo el furgón Citröen de una pizzería casi anónima, con el que supuestamente termina la colección, el canto al desperdicio.

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  8. Qué suerte que ahí tuvieron desde bien pronto una gran variedad de este magnífico todoterreno/ranchera/furgoneta/lo que hiciera falta. Aquí en España, apenas hubo un par o tres de modelos, y muy muy tardíos.
    La miniatura es sensacional. No se le puede poner ni un solo pero. Saludos.

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    1. Voy a ser sincero, suerte lo que se dice suerte no es lo que sentimos de tenerlo, efectivamente el chasis y la carrocería eran de una robustez indiscutible pero el motor nunca estuvo a la altura de las circunstancias.

      En los años venideros década del 80 en adelante se desarrolló una suerte de culto por estos vehículos pero la mayoría eran cascarones de Jeep con mecánica dispar (sea Ford, Chevrolet, incluso con motor Indenor de Peugeot)... La llegada de las SUV resultó el final de la popularidad de éstos Jeeps de verano.

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