Dodge D100 (1975) - Autos Inolvidables Argentinos

Tiempo atrás, digamos décadas atrás, visitaba un excelso coleccionista que me mostraba su colección infinita. Con aires de suficiencia me decía "El auto que se te ocurra, lo tengo" con una seguridad inquietante.
Pasamos revista de autos conocidos, luego buscamos exóticos, siempre encontrando el modelo que lo represente, la verdad, una colección extensa...

En un momento pregunté por el Gol, el primero, el "cuadrado" y salió presto a su busqueda entre las vitrinas... "Aquí esta!" Dijo sacando un modelo de Volkswagen mientras me corría la transpiración por la espalda, en aquel momento resultaba imposible una reproducción de ése auto tan mercosur.

En efecto era un Scirocco en una versión temprana, medianamente similar en sus formas... Pero era un Scirocco.
Ópticas de Scirocco, forma de Scirocco, el modelo decía Scirocco por todos lados... Entonces les digo: "No es un Gol, es un Scirocco"
.
Él sujetó fuerte el modelo, la mano le empezó a temblar, se le achicaron las pupilas y empezó a respirar de manera forzada y violenta... Como no emitía palabra y me seguía mirando fijo le dije "Está bien, es un Gol".

A qué viene este introducción? Pues bien, hoy traemos la Dodge D100, con ésta camioneta puede decir (Si compró las anteriores) Que la tiene como ambulancia, 4x4, 4x2, caja abierta, caja cerrada, parrilla vertical y horizontal, linda, fea, la más vista y la menos vista. D100 o D200.... Haga lo que quiera, traiga a quien quiera, que le pregunte por una Dodge y con alguna de éstas seguro sale bien parado.

Cuando los modelos de camionetas Ford hicieron su aparición en los coleccionables, rápidamente llegó el reclamo por las Chevrolet, es que ambas se nutren de la legendaria rivalidad entre estas marcas que ya parte del folklore nacional.
Pero Dodge es un caso aparte, son bienvenidas aunque no largamente esperadas, cualquier lista las tendría presentes indudablemente aunque no serían prioritarias, antes estarían las Ford y Chevrolet.

El utilitario real no tuvo una historia muy diferente, no fué la Dodge  a la que tiraron del Hercules volando, ni fué la rival directa de la camioneta líder del momento... Digamos que ser tercera en un grupo de tres marcas americanas es... una forma elegante de decir la última.
Agena a toda pasión y abrazada al utilitarismo la Dodge se compraba para trabajar, se vendía y seguía trabajando y se volvía a vender para seguir su historia de trabajo en otra parte.
Siempre trabajando y nunca presumiendo, es raro encontrar una Dodge "mimada" con llantas especiales y neumáticos de pisada ancha, simplemente cubiertas de trabajo y sus eternas llantas de chapa.
El atractivo del modelo es ése, no por representar una versión custom o mejorada, sino la versión virgen y simple tal como la entregaban en un concesionario.
Ver estos vehículos todavía circulando en un avanzado estado de deterioro nos lleva a ver en el modelo su estampa en estado prístino y su belleza perdida.

Es común ver Pick Ups Ford restauradas, en proceso de restauración o simplemente con dinero invertido en las mismas. Mismo caso para Pick Ups Chevrolet... Pero Dodge son pocos y extraños los casos, quizá alguna con motor Slant Six, pero con el motor Perkins diesel a lo sumo se les da una lavada de cara para seguir trabajando...
Sí corre mejor suerte el modelo anterior de Dodge, la del 59, que vino importada pero son pocas las sobrevivientes.

"En los 70s, de cada diez gringos que compraban estas chatas, por lo menos seis tenían la mujer que se llamaba Haydée" Información confiada por mi Topo de cabecera en cuestiones de vehículos antiguos.
El Topo esta viejo y sufre una crisis de veracidad en sus datos de origen dudoso y lógica incierta, entonces rápido subraya "Vos agarrás, buscas viejas que se llamen Haydée que tengan terreno grande y seguro encontrás una chata de éstas tirada".

Suena prometedor, aunque el Topo a sabiendas te cambia de tema o se va...

¿Cómo distinguir a las Haydées dentro de la población de viejas?

Y de encontrarlas... ¿Uno tiene que ser de catastro para ver el terreno donde vive?

Son respuestas que el Topo dice saber pero nunca las va a dar.

El modelo es interesante, lo primero que sale a relucir son sus vívidos colores. Luego de una estéril ambulancia blanca hasta el hartazgo y una D200 en un profundo azul, despacharse con un rabioso naranja combinado con blanco le da mucha presencia.
Solitario se lo aprecia amplio y masivo, ya entre los modelos anteriores de la marca sorprende su baja estatura. Respecto a la 4x4 es lógico pero no hay proporción respecto a la ambulancia.

La caja es corta, fueron repetidos los comentarios que resaltan éste punto y es que vista así resulta un tanto irreal, justamente uno de los puntos fuertes de la Dodge es la longitud de la caja en desmedro de la estética de la camioneta.

El modelo luce armonioso, con proporciones propias de las marcas rivales pero si se la imagina con la parte trasera más prolongada verá como se pierde encanto.
Eligieron hacerla "linda" o en una versión "internacional" ya que seguramente ésta caja debió existir en otros mercados.
No es el fin del mundo, créame que vale por una Dodge D100, la longitud de la caja es perdonable y hasta explicable.

Un modelo con mucha superficie pero que concentra la mayoría de los detalles en el frente.
La parrilla delantera es la que venimos esperando desde la primera aparición, cromada y en disposición horizontal, la luz de giro se resolvió de manera simplona pero efectiva, ópticas chuecas como es norma...

Tampografía generosa de DODGE, matrícula de época y buenos bulones cabeza de tanque en los paragolpes.
Detrás de la mascarón cromado la parrilla pintada de negro está prolija.

La insignia lateral pierde en el contraste gris-naranja pero está. Es legible y bien aplicada.

Las ruedas tienen todo el aspecto de ser genéricas pero las reales tampoco tenían formas distintivas.

Una luz extra de giro/posición suma algo de riqueza visual a ésta parte del modelo.

Interesante picaporte, muy digno para ser parte de la matriz de la carrocería y no un inserto.

Bien por el detalle del ventilete mas alto que la ventanilla.

Los limpiaparabrisas cromados se acomodan dentro de lo que sería el promedio dentro de ésta colección, ni suman ni restan, al menos acompañan.

El espejo retrovisor se agradece y si se tomaban la licencia de poner dos también. Es un modelo que no da muchas oportunidades de meter cromo salvo paragolpes y parte delantera, dejando un tanto insulsos los laterales. Por eso el retrovisor resalta tanto.

El interior es algo representativo, no mucho, el tablero nos da las formas pero resulta tímido para marcar sus detalles. El volante bien.

La rueda de auxilio fué intervenida, siendo las mismas que calza se le quitó material plástico en la parte de atrás para dejarla más próxima a la pared de la caja.

La unión entre la caja y la cabina es bastante buena, se aprecia que son piezas separadas y la franquicia entre las mismas es adecuada dándole más realismo.

La fijación del paragolpes trasero por medio de nervaduras es muy bueno.

Por último una mirada a la parte trasera donde hay mucho trabajo de matriz y pintura.

Las ópticas traseras son discretas como en el utilitario real, todas rojas y un delgado marco cromado, no se puede pedir más.

En ése apartado dentro de la colección, donde se alberga los utilitarios americanos, sumar piezas nuevas no es fácil. Se puede acceder a variantes de camionetas de Ford y Chevrolet pero por lo general se termina dando vueltas sobre lo mismo: Variantes de color o distintos grados de calidad.

Pero siempre las mismas camionetas.

Estas incorproraciones de Dodge fueron una bocanada de aire fresco.

Magníficent Dodge D100!!!