Vamos por el once, bueno, en realidad los once fueron el mes pasado. Festejar otro año cumplido es muy desabrido luego de festejar la década, supongo que para los sucesivos será lo mismo.
Por que no poner fanfarrias y anunciar una nueva temporada?
Y dejemos un poco los años de lado, que sólo hacen es daño.
Nueva temporada, inspirado en "Todavía una canción de amor" de Calamaro empiezo con una nota algo especial.
Que me sigo mordiendo noche y día las uñas del rencor...
Que te sigo debiendo todavía una canción de amor...
Vamor a cambiar la canción de amor por esta nota y las uñas lo resolvemos sobre el final.
FLASHBACK!
Un joven muy joven Reyes, un Niño Reyes, cursa el segundo grado de la primaria. Infante preguntón sin miedo al cuerpo docente los cansaba a preguntas.
Una tarde como tantas otras, se le indica al grado que cada alumno dibuje la casa donde vive.
No parece algo descabellado, recuerdo mirar mis compañeritos haciendo casitas, algunas con techo plano, otras a dos aguas, chalecitos, modernas, antiguas...
El niño Reyes no dibujaba, iba con el cuaderno en blanco hasta el docente que a tres metros lo rechazaba con la mirada y volvía sin preguntar nada...
¿El Problema? Vivía en un departamento en 1° piso. ¿Cómo dibujar exteriormente un puto departamento?
El tiempo se agotaba y "algo" había que dibujar. Entonces en un esfuerzo conceptual y ya que el departamento daba al frente dibujó el primer piso: Un rectángulo, dos ventanas... un balcón.
El compañerito del lado observa la obra... "No tiene entrada eso".
Era cierto! Entonces el niño Reyes dibujó el Hall de entrada, espacios comunes y el departamento de planta baja para que el departamento donde vivía no quede flotando en el aire.
Resumiendo, dibujó el complejo de departamentos completo.
-Esa es tu casa?
-Y... si.
-Que caserón!
De pronto me vi rodeado de compañeritos que antes no me hablaban... El niño Reyes se codeó con niños de la alta... Por poco tiempo.
Por poco tiempo, pero suficiente para conocer lo mejor que se le podía dar a un niño en los 80s.
Un Atari, Una Commodore 64 o 128, un Scalextric... De pronto los Reyes Magos tenían un listado imposible en un contexto hiperinflacionario. Nada era prioridad, nada llegó.
Pasaron años, cambié de barrio, cambié de colegio, amigos más parecidos a uno (secos!)... Sin embargo el recuerdo de aquellas mieles tecnológicas me perseguía.
Un patio desarreglado con permiso para hacer lo que sea se transformó en un laboratorio al aire libre: Podría lograr construir un Atari? Definitivamente no. Pero donde hay video juegos hay flippers, un PinBall es algo más posible... Manos a la obra...
A la media hora de estar serruchando una tabla la tarea se suspende... Los flippers eran aburridos... Para que fabricar uno?
Pero un scalextric... el prohibido scalextric... el archinegado scalextric...
MANOS A LA OBRA!
Unas maderas de una tarima y un serrucho que no cortaba nada se llevaron las primeras tardes.
Trataba de emular el sistema modular de rectas, pero no encontraba técnica de encastre satisfactoria con lo que tenía a mano.
Cortar para unir... cortar para unir... Si no puedo unir... ¿Para qué quiero cortar?
La recta tendría... El largo de la madera.
Pero el recuerdo del Scalextric indicaba que la guía era de un precisión imposible de lograr con esas tablas con cortes improlijos.
Al día siguiente, con dos tablas cortas se clavaron los largueros paralelos.
Luego un caja grande cartón rígido vino al rescate, era firme, con cantos perfectos. Un cuchillo filoso de la cocina ayudó para conseguir los dos paños. Tuve heridas, pero el cartón absorvía bien la sangre.
Los dos paños de cartón sí ofrecían el paralelismo necesario, prueba superada. Faltaba fijarlos con tachuelas.
Pero antes...
Faltaba el elemento conductor, a mi temprana edad tenía idea de la electricidad, no mucha pero lo suficiente para entender como funcionaba un Scalextric.
Corté lonjas de unas latas de leche en polvo, con paciencia (mucha) las doblaba sobre su eje longitudinal y luego las cerraba del todo con una pinza mordiendo el canto del cartón.
Luego las lijaba para asegurar el contacto con las escobillas.
Obviamente no era una sola pieza, longitas de 10 a 15 cms solapadas unas con otras.
Una semana duró la tarea, otro reto cumplido.
Durante ese tiempo, recordaba el videojuego Out Run en su versión para las computadoras MSX. En las curvas el camino pegaba unos latigazos contra el horizonte, como si se fuera manejando por un hexágono y no una curva.
El trabajo que me daba doblar las tiras de hojalata en línea recta me ponía en aprietos para encarar una curva.
Quedó para mas adelante la solución "MSX":
Para más adelante... Antes había que poner en funcionamiento la recta, como si fuera una prueba de cuarto de milla.
El mando del scalextric, si bien sabía que regulaba la velocidad, el cometido de niño era tenerlo a fondo, siempre.
La regulación de velocidad me resultaba una sofisticación innecesaria. Aparte no entendía su funcionamiento.
Un pulsador de timbre domiciliario que encontré tirado fué la solucion.
El botón TODO/NADA había llegado.
El bólido ya estaba, se trataba de un Médano Cross de Galgo-Eurostil:
Se le retiraron los resortes de la suspensión, se le agregó una guía en la parte delantera, el cable del control remoto se hizo corto y se reubicó abajo con las puntas peladas, oficiando de escobillas.
La fuente adecuada para el motor del bólido se suponía debía ser de 3 voltios ya que usaba 2 pilas AA
Tenía tres transformadores extirpados de artefactos varios sin ningún tipo de nomenclatura respecto a la salida de los mismos.
El voltímetro era un lámpara de auto doble filamento descartada por que se le había quemado uno.
La colorimetría es una ciencia dura, uno a uno probé los transformadores y de acuerdo a la intensidad con que encendía el foquito tenía un aproximado.
Si se quemaba eran más de 12 volts
Si encendía bien pues eran 12 volts
Y luego en escala de tristeza vendrían voltajes menores.
Buscando los 3 volts sería un "tristísimo"... Tomé el más triste de los tres.
Fué un sonido, un instante, como cerdo sacrificado, el Médano Cross emitió un alarido de muerte, como dicen ahora "salió del grupo".
El bólido se transformó en basura.
La colorimetría es una ciencia dura... Durísima en ése momento. Recuerdo que eran las siete de la tarde y el sol se iba, la jornada me abrazaba despidiéndose con una desgracia.
Al día siguiente no me asomé al patio, sabía que me esperaba y sin el Médano Cross el proyecto no tenía destino.
Había logrado la recta, el mando, faltaba el bólido y la energía, más que pensar en una solución aquél cerebrito de 12 años esquivaba la estocada final que daría por terminada la aventura.
Pensar... Pensar... Cuál es el problema? Conseguir un motor y la fuente adecuada.
Frente al cuarto de cachivaches veo asomar un viejo grabador monoaural que nunca jamás consiguió técnico que lo repare.
Del mismo retire el motor extendiendo los cables que le daban energía, quedando el grabador completo como transformador y el motor esperando ser montado.
Asi nace el Model One de Auto Modellbaus.
El uno, el único con mas requisitos que soluciones. De más está decir que no era algo que atesoraría y ahora me arrepiento. Mis doce años le daban la espectacularidad, pero en aquél entonces yo sólo miraba lo que lograba, no miraba mis doce años...
Y ante una comparación injusta con un producto comercial, uno veía que hacía basura.
EL MODEL ONE
(También conocido en los 80s como me cago en la puta pobreza)
El motor del grabador tenía un torque interesante, más potente y fiable que los típicos de juguete.
Era claro que el bólido debía desarrollarse teniendo en cuenta el motor.
Un primer chasis improvisado con un soporte de espiral para los mosquitos resulto mezquino. Maleable para darle forma y a la vez maleable para perderla, tampoco entraba dentro de sus cotas el motor.
El Médano Cross podría haber donado sus ruedas pero ya había partido en la bolsa de residuos.
Las ruedas fueron en definitiva cuatro rodamientos para aberturas que giraban muy bien. Al tener bolillero giraban con suavidad y no necesitaban un eje solidario que gire con las ruedas.
Los ejes fijos fueron dos recortes de fibras secas con tapas traseras de ambos lados, luego se mascaba en la boca cada tapa de atrás hasta que entraba en el centro del rodamiento.
Y el chasis? Vendría aportado por una lata de atún.
(Las imágenes pueden herir la sensibilidad del lector)
Se puede apreciar que las latas de atún en los 80s venían con doble nervadura, abriéndolas de ambos lados y haciendo un corte, sólo exigían los mazazos suficientes en el patio para dejarlas planas.
Luego se procede al enrulamiento (si es muy técnica la literatura me avisan!) de los extremos para sujetar los fibrones, hoy llamados elegantemente "ejes no solidarios".
Los rodamientos puestos a presión le daba un aspecto más avanzado, había que "acomodar" el chasis para que las cuatro ruedas pisen.
Luego vendría una etapa de ajuste donde se iría recortando y volviendo a enrular uno de sus extremos hasta el calce del motor.
El motor calzaba entre los ejes, la transmisión fue resuelta a las apuradas con una banda elástica, los rodamientos tenían la pisada calada para circular por un riel, aqui sirvió para calzar la banda de goma.
En un principio se pensó en darle impulso sólo a la rueda trasera, no disponer de una banda elástica más chica obligó a extenderla a la rueda delantera.
Luego una cinta aisladora daba vuelta longitudinalmente al "modelo" dejando todo unido.
Se hicieron pruebas fuera de pista, usando el grabador como si fuera un control remoto con cable.
Funcionaba muy bien, en cualquier superficie incluso sobre el pasto... Era un tanque.
Superadas las pruebas, seguiría la adaptación al sistema de escobillas y una guía necesaria para desempeñarse como slot.
NOTA: Al final la sofisticación del "eje no solidario" le jugó en contra, ya que tenía tracción en una rueda adelante y otra atrás. De estar unidas por el eje, el Model One hubiera sido 4x4.
Y llego el momento de unirlo todo: Pista (madera y cartón), pulsador (un timbre), fuente (grabador roto) y el Model One (Bólidus Rejuntadus de todos lados).
Conexión a 220 volts...........OK
Press play on tape................OK
Conexión al pulsador...........OK
Conexión a la pista..............OK
ALL SYSTEMS GO
Y le pegué al timbre como si fuera sordo, dejando el interruptor TODO/NADA en TODO.
Y el Model One no se movió ni un milímetro.
Hasta el día de hoy al recordarlo pienso que fué una proeza y que el resultado final fue mezquino, insuficiente, sorete, miserable...
Dicen que lo malo es no haberlo intentado nunca...
Digo que la divina providencia me debe tres pásadas (mínimo) del Model One por esa recta y no tiene forma de pagarlo hasta el día de hoy.
Que me sigo mordiendo noche y día las uñas del rencor...
Difícil tarea la de ser un conquistador, un adelantado, uno pone todo su esfuerzo, incluso los limitados conocimientos, toneladas de entusiasmo, que, lamentablemente, no siempre dan sus frutos. Aún de grande, las cosas tienen sus vueltas, valga como anécdota, hace no tantos años, y fabricando una maqueta de un proyecto arquitectónico (confeccionar maquetas de arquitectura es mi actividad principal) que tenía que abrirse cual transformer para mostrar su interior, tuve dos o tres contratiempos dignos de mi ignorancia infantil (cuyos resabios perduran), llegando, incluso, a casi prenderse fuego, unos diodos no considerados me mezclaron la confluencia eléctrica donde no correspondía. Afortunadamente, no solo se salvó del incendio, sino que, aún años después, sigue funcionando. Estimado Cabo, lo felicito por la tenacidad en la aventura y por la permanencia al frente de este punto de reunión. Un gran saludo. Luis
ResponderEliminarVeo que el talón de aquiles de los proyectos jóvenes era la electricidad.
EliminarMe siento identificado! Me trae los recuerdos tus bocetos, cuando le dabamos vuelta a las cosas para encontrar la solución y ese era toda la razón de nuestras vidas, además de ver la tele, cambiar figus y salir a vagar a la siesta. Recuerdo cuando de chico, además de seco, era destructor y mis padres no me regalaban chiches, menos que menos los que yo quería tener... Así que con unas tijeras, cartón y pegamento escolar comencé a hacer mis propios autos, patrulleros, camionetas, aviones, helicopteros, naves, barcos, etc... de las pelis y series de la tele de los 80's. Trataba de tomar todos los detalles de los modelos mirando de la pantalla de la TV, con un papel y un lapiz a mano para garabatear un rudimentario boceto en el tiempo que duraba la emisión. Al principio las maquetas no eran muy fieles en escala y fidelidad, pero cumplían la función para las que los armaba: eran para jugar hasta que se hacian pelota, eran modificables, reparables y descartables. Con el tiempo aparecieron las suspensiones, interiores detallados, puertas que se abrian, etc... Muchos sucumbieron en saltos, choques y explosiones controladas... La verdad fueron las mejores épocas. Fué así que me llevó décadas mejorar las técnicas de construcción, materiales, detalles y terminación. Hoy, sigo crocante de seco, pero si hay algun modelo que me interesa tenerlo pero que no llego (por seco), me lo fabrico yo mismo para tenerlo en mi colección, Y es una gran satisfacción hacerlas con tus manos.
ResponderEliminarSeguramente la aparición de alguno de esos modelos de antaño sería algo muy emotivo.
EliminarComo obras de arte, hacer una reproducción del original no sería lo mismo.
uau....maravilloso. A esa misma edad (no se si en el mismo año, mis 12 ocurrieron alla por el 76, y me parece que aun no habia nada parecido al Medano Cross...) con un amigo encaramos la construccionde un (tambien inconseguible) tendido de tren electrico escala ho. conseguimos una vieja puerta placa que serviria de base, dibujamos un bastante complejo recorrido, que incluia varios "Cambios de via", y arrancamos. durmientes de madera balsa (se cortaba una plancha de balsa en tiras de alrededor de 3 mm, y luego cada uno de los durmientes, de unos 3 cm), para luego pintarlos con una fibra sylvapen marron uno a uno. luego se pegaban, y sobre ellos, pegabamos los rieles hechos con largueros de balsa de 1,5 x 1,5 mm. el paralelismo de los rieles lo ibamos controlando con un boogie comprado en Aerosur, de la calle Parana en Capital (la unica adquisicion....). Recuerdo que especialmente complicado fue hacer las curvas (poniendo el riel interior, fijandolo con alfileres hasta que secara el pegamento, no existia la gotita, pura plasticola...), para luego ir colocando cuidadosamente el riel exterior, controlando con el mencionado "boogie". Los cambios de via fueron todo un desafio, primero hicimos dos o tres pruebas "externas", sobre una tablita, hasta que dimos con el diseño correcto (una tirita de la misma balsa de ls durmientes unia los rieles moviles, y se desplazaba a mano.) cuando ya teniamos el recorrido casi completo...caimos en la cuenta que los rieles de balsa no eran conductores, y que no habia forma de alimentar el motor de una locomotora (tampoco habia forma de conseguir una, pero eso ya se veria mas adelante). pensamos miles de soluciones posibles (cubrirlos con tiritas de papel de cigarrillo, con un cablecito de cobre, y no recuerdo que mas) pero de a poco, se fue acabando el verano y el entusiasmo, y el proyecto quedo en el fondo del patio de la casa de mi amigo, destruyendose de a poco durante el siguiente año. Con el tiempo, termine decantandome por los autitos, y nunca tuve un tren. pero ese verano y ese proyecto fue algo inolvidable. creo que hacia facil 20 años que mi cabeza no pasaba por este recuerdo, asi que muy contento con la nota!!! Felices 11 años!!!!
ResponderEliminarTodos los rieles y no tenían locomotora?
EliminarYo tenia el Medano Cross aunque al final no cumplió como buen Galgo que era.
Excelente reseña Cabo, que buenos recuerdos y tan bien expresados!
ResponderEliminarMe acaba de recordar que en mi infancia allá en la provincia de Santa Cruz hace muuuchos años, conseguía muy de vez en cuando cuando alguno de mis padres viajaba a Buenos aires, que me trajeran alguna "miniatura" como se llamaban entonces, de un auto 1/43, podía ser un Buby o tal vez un Corgi Toys si tenía mucha suerte.
Tomaba el modelo, y para la época de Navidad donde el tiempo permitía jugar al exterior, me iba a una cancha de básquet al aire libre, con elautito munido de dos cañitas voladoras a cada lado y luego de encenderlas, ver a qué distancia llegaban con ese impulso dentro de la cancha, de tener suerte, sobre sus ruedas, y si no, dando infinitos vuelcos..
Cargis, Bubys y cañitas voladoras
Eliminar(pescadoras si lo prefiere a Romay)
En la misma frase, en la misma idea, puede producir urticaria en mas de uno que pase leyendo.
Y también me recordó cuando quise hacer andar un motorcito que funcionaba con pilas (una o dos, no recuerdo), enchufándolo directamente con sus dos cablecitos a un echufe de 220 Volts corriente continua (lo que había en mi pueblo en ese entonces). Fue como su motor, hizo un chillido infinitesimal y PUM!!! adiós para siempre, por suerte no me electrocuté, mis padres jamás se enteraron...
ResponderEliminarNi Tesla se animó a tanto!
EliminarQué epopeya! esperaba un final con al menos un intento de movimiento, no la nada misma.
ResponderEliminarQué detallado recuerdo, sorprendente, no tengo memorias así tan minuciosas de algunos experimentos que hice.
En mi caso nos habían regalado (a mi y a mi hermano) un tren eléctrico, no mis padres sino un tio, a temprana edad como para valorarlo y cuidarlo como algo así requiere, si bien nunca fui de romper juguetes esta claro que un tren no es para el uso diario de un niño de 8-10 años (y su hermano menor de 5-7), y sobre todo andar armando y desarmando el circuito en 8 en forma cotidiana por la falta de espacio en casa como para tenerlo armado permanentemente sobre una madera, está claro que a la larga todo se iba a estropear.
Recuerdo sí que este tren no funcionaba con transformador sino con pilas, esas gordas grandotas (y caras), con lo cual era frecuente no tener pilas.
Una vez ante la falta de baterías armé un cable como para enchufarlo a los 220v, no tengo claro si mi viejo se dio cuenta y me lo impidió o fui yo quien no se animó, menos mal quizá hoy no estaría aquí escribiendo esto, no eran épocas de disyuntores salvavidas.
No es virtud de la memoria sino del sufrimiento. El proyecto era ambicioso y exigía demasiado.
EliminarEstar serruchando horas no era algo ameno, lo que se cuenta en un renglón en segundos bien eran días.
A la vez el propio proyecto comprometía, era tanto el esfuerzo puesto que merecía terminar, el problema era que pedía mas esfuerzo, como una bola de nieve.
Lo mejor de todo es poder recordar ese entusiasmo y pasión que se tuvo en esos momentos, en esos tiempos y poder contarlo; de hecho contagiarlo..
ResponderEliminarTremendo reto de ingenio y habilidad para un chico de 12 años Cabo.
El Model One, wow..
Y felicitaciones por otro Año Modellbaus!
El Model One, noble vehiculo que fue llamado a servir como bólido y tenía potencial de blindado antidisturbios.
Eliminarlo felicito cabo! Que linda historia.
ResponderEliminarYo fui siempre arriegado en eso e hice la pista scalextric con madera como ud reseña yponiendole cable coaxil para que haga contacto en cada lado, un laburo de loco sacar lo de adentro para luego pegarlo. Por suerte en esa epoca mi abuelo tenia un soldador vesubio y tambien mucho estaño (si habre inhalado resina plomo y estaño...en fin)
un trafo viejo de vaya a saber que cosa y un auto usado al que luego le puse un motor de un motobox rasti....se termino quemando. en fin.
Por suerte en esa epoca mi viejo laburaba en knittax que era la fabrica llena de alemanes que fabricaba los rasti. Y podia traer cosas de la fabrica (eh no piense mal, no se le quedaban pegadas)
Luego como aca mas arriba psaamos a los trenes. alguna fiesta de fin de año, papa noel se asocio con los reyes magos de toda la familia mas el raton perez...y llego un tren lima con un recorrido redondo una loco y tres coches (los vagones son los de carga o los que son muy vagos)
Y pinto hacer las vias con balsa y con el cable central del coaxil que habia sobrado del proyecto scalextric...que laburo por dios....y con resultado tirando a malo. el cobre pegado con pegatodo "alba" (ese amarilo y azul de envase) a la via de balsa no era lo mejor.
y asi fue como segui tecnico electronico y carrera inconcluso de ingenieria electronica...
que lindos tiempos.
Luego tuve una etapa medio incendiario...pero esa es otra historia.
Me hizo acordar que también especulé con dos cables desnudos arriba y la guía abajo.
EliminarColgando dos ganchos desde wl bólido seria un hibrido entre slot y trolebús.
Era mas sencillo en rectas por eso tentaba, pero no le encontraba la vuelta a las curvas.
Hermoso texto, movilizador de recuerdos!
ResponderEliminarYo hice varios intentos, me desvelaba el tema del tren eléctrico, la pista de gravedad, el autito eléctrico (no slot) y una vecinita, todos me tomaron horas de planificación y estrategia, luego intentos fallidos y regreso a la planificación.
Lo que sí me funcionó, que no fue mérito mío, sino de la simpleza del concepto fue una pista de slot muy grande (unión de un 8 que tenía un amigo de enfrente y una O que tenía yo, ambas marca Miami que era una versión nacional de la Scalextric original), que corríamos autitos diecast 1/64 con una chinche pegada en su base con cinta adhesiva, una impensada simbiosis de slot y manocontrol, que me dió muchas horas de sano esparcimiento.
Y mejor que fue así, porque la vecinita nunca me dio bola.
Quiza a la vecinita no le interesaba el slot. SEGURAMENTE FUE ESO!
EliminarEra un tema recurrente pretender "algo más" de los 1:64 que se veian sobrepasados por otro tipo de vehículos autopropulsados.
Me recuerda mucho a mi infancia, preadolescencia. Cuanta inventiva y cuantos motorcitos Mabucci que sirvieron para pruebas y error. Con mi hermano menor sacrificamos autos, lanchas y todo lo que llevara pilas. Al final, algo se armaba y funcionaba. El mejor fue un hidrodeslizador con motorcito de 3v, una hélice de algún avioncito con motor a goma y el telgopor de una heladerita vieja que había en casa. Épocas de juegos sanos y mucha ingeniería amateur.
ResponderEliminarHidrodeslizador? Eso ya era alta escuela.
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