Fiat 125 Multicarga (1973) IAVA - Vehículos Inolvidables de Reparto y Servicio

Por la década del 70, el vehículo grande que salía de la línea local de Fiat era el 125, si bien en comparativa con el resto de las automotrices el tamaño de éste Fiat resultaba un mediano-chico, entre los demás autos de la marca resultaba el de mayores dimensiones.

No sólo el volúmen de la carrocería, su potencia y consumo estaban a la orden para considerarlo un grande. Digamos un grande a la italiana. 

Su diseño tenía una base cúbica, moderna para la época con volúmenes bien definidos, un diseño esquemático y prototípico de un sedán que luego se refinaría con discretas molduras y nervios en el chaperío.

Su diseño por un lado lo penalizaba frente a diseños más osados de otras marcas, no resultaba aerodinámico como un Renault 12 inspirado en una flecha, tampoco tenía los faros trapezoidales del Peugeot 504. 

Sin embargo por el otro lado le ofrecía una polivalencia notable, la versión "rural" resultaba natural y no resultaba un desafío de diseño, tampoco la pick-up que estamos viendo... Y si se les antojaba hacer un cabrio o una especie de vehículo recreativo playero con techo de lona daba lo mismo. 

Siempre la misma receta, reforzar a nivel estructural y luego quitar o añadir, el diseño exterior jamás sería un problema.

El éxito comercial de la Fiat 125 multicarga si se considera moderado es generoso. Resulta que el consumo de combustible para llevarse a si misma era alto. No variaba mucho respecto a si estaba cargada, siempre su consumo era alto y su capacidad de carga limitada en peso y volumen.

Las unidades que llegaron a la década siguiente recién pudieron mostrar valor utilitario impulsadas a gas natural comprimido.

Modelísticamente se siguen pasos idénticos, años atrás Starline nos ofrecía unos magníficos Fiat 125 a costo razonable que sirvieron de base para lograr versiones Rural y Pick Up con resultados variados, sujetos a la destreza del modelista. 

Resultaron en piezas únicas (y en piezas arruinadas hay que admitirlo) pero se siente el sabor de la aventura de manera intensa. Hoy no recomiendo esa práctica ya que el enciclopedismo de Salvat hace que uno se siente tranquilo y en un par de meses sale y lo compra. 

A futuro nos espera un florecer de vehículos especiales sin duda, pero hoy no.

Volviendo al 125 no sorprende la modificación de faros respecto al sedán. En general, las fabricantes los consideraban vehículos de trabajo y la parte delantera resultaba en una versión espartana del auto.

Le sucedió al 504 y le sucedió de igual forma al 125: Una óptica redonda de cada lado es suficiente.

Una parrilla prolija (con un una tampografía imposible al medio) es acompañada por dos grupos ópticos reproducidos de modo vanguardista.

Las ópticas redondas, de acuerdo al manual clásico, se buscan en la escala adecuada y se las hermana con su marco respectivo, luego un acrílico en dos tonos puesto al lado termina la obra... 3 piezas.

Aqui un fondo metálico hace de marco y óptica, a la vez que la transparencia hace de vidrio de la óptica y de las luces de giro. Resultan en dos piezas más grandes y sencillas de ensamblar. Las ópticas quedan bien pero el marco de la óptica principal sufre en el resultado final.

El marco debería brillar como el paragolpe comparando cromados. Así, luce como una óptica de una Range Rover. 

Los paragolpes sí, están dentro de los parámetros de lo aceptable.

Los limpaparabrisas están bien. 

Quizá sean los insertos más ingratos ya que de estar mal colocados resultan en un defecto molesto y cuando están puestos a la perfección el premio es "no llamar la atención".

El retrovisor es decente, no es que esté mal puesto, es el zoom, ya me dijo el juez que me va a poner tobillera electrónica para que no pase los 3X.

Es que no hay cielo sin zoom, al interior sólo se accede con macro para descubrir ése volante propio del vehículo, quizá algún día se animen y hagan aros mas finos. 

Detrás el tablero que nada sabe del que equipa la berlina, éste mas sencillo, pocas agujas y más luces testigo.

Afuera, el picaporte esta bien logrado, más considerando que es un detalle en la propia matriz con dos manos de pintura encima (blanco y el detallado en plata).

Sobre la puerta la tampografía de IAVA luce impecable y las inscripciones debajo bien legibles, no se puede pedir más.

El teléfono? Para qué? La función de poner IAVA en la puerta es de imagen y presencia, la actividad comercial de IAVA era con Fiat y no con el público, a pesar de que eran los usuarios de sus productos.

Con anterioridad a éste modelo, se lanzó la versión a escala de la Fiat 1500 Multicarga, la misma llevaba ruedas de Fiats en su parte trasera.

A la hora de hacer la Multicarga 125, el equipo de creativos dijo tener una idea genial: Ponerle ruedas en su parte trasera.

Podríamos discutir horas barajando causas y motivos: Quizá los creativos tenían contrato fijo y en pesos... Quizá IAVA sólo usaba la multicarga para llevar ruedas...

La cuestión es que las ruedas que lleva son IAVA y con eso para muchos fanáticos es suficiente y hasta necesario.

Por otro lado puede apreciarse que las líneas de la caja de carga son obvias. Aunque los pasaruedas internos me resultan demasiado altos, exteriormente esta muy bien reproducida.

Si Usted la adquirió sepa que el caño de escape esta esperando una intervención de su parte, aunque sea pinte su extremo de negro.

El paragolpes trasero es el indicado y hace juego con el delantero, suma.

La matrícula trasera luce bastante bien, siempre tienen problemas de espesor.

Las ópticas traseras son de una pieza, sobre sencillas simplificadas, pintadas a dos tonos, cierran con cierta decencia el modelo. No fallan ni asombran.

La tampografía a tres tonos es defendible, acostumbrados a perfecciones inexplicables una leve distorsión, de fracción de milímetro, se perdona.

Nos quedaron las ruedas, resulta inevitable contrastarlas con las que carga en su caja pero en rigor son las correctas. Bien de formas, bien detalladas, pero el tono plata chillón les juega una mala pasada, pedían ser grises no plateadas.

Ya viendo la totalidad del modelo son pocos los detalles a corregir, si es que merecen ser corregidos. Es un modelo bien resuelto. Pareciera que los distintos fabricantes ya sea IXO, PCT, Salvat, Mercury, Starline o Buby (cada uno en su tiempo) dan en la tecla a la hora de reproducirlo.

Sospecho después de todo, que el Fiat 125 sea el modelo más amable para reproducir en escala, amabilidad que se devuelve con un buen resultado.

Magníficent Fiat 125 Multicarga!