sábado, 9 de febrero de 2019
IES 3CV América (1986) - Autos Inolvidables Argentinos
Citroën en Argentina tuvo una existencia discutible, su entusiasmo por ofrecer los coches mas elementales y económicos de la marca no sólo reflejaba su poco interés por invertir, también reflejaba la valoración que tenían del mercado local: No nos consideraban "aptos" para la línea DS.
Se puede pensar en cierto elitismo, pero también se puede pensar en cierto conservadurismo local.
Culturales Modellbaus!
Uno quiere decir retrógrada, pero es más elegante y atento al buen trato decir que es conservador.
Si la mecánica del Fiat 128 nos parecía lisa y llanamente mala en los 70s (motor transversal, tracción delantera y sus cambios de correas... Cosa que hoy es lo más normal del mundo) ¿Qué podríamos decir de un auto con suspensión neumática regulable en altura? Conocimos recién el Pallas en los 80s cuando lo importaron y lo mirábamos como una nave espacial cuando en realidad ya casi todo existía desde la línea DS.
Luego de un breve repaso de la novela "Citroën no nos consideró dignos y nos tiró citracas" podemos encargarnos del IES.
Pues bien, ya a esta altura muchos habrán leído que son las iniciales del Ingeniero Sal-Lari por eso se llama ISL... No la gran put...
Ahhh Se llamaba EDUARDO! Entonces ahí sí queda, con Eduardo al medio, IES!
Eduardo, vamos a llamarlo así, en confianza, tenía una fábrica de amortiguadores y pasó de ser proveedor de Citroën Argentina a propietario de la misma al comprarla en los 80s. Una aventura interesante debido a que rara vez un emprendimiento de tal magnitud dure casi una década sin fundirse.
Usted imagine comprar una fábrica de autos y llevarla adelante, no es para cualquiera, supone cierta destreza y conocimiento de donde se está metiendo. Aparentemente Eduardo lo tenía, sabía que el citronero argentino es ante todo fiel y que el universo sólo puede comprenderse si se mira por el parabrisas de su amado esperpento.
No en vano la producción de los esperpentos no se detuvo nunca hasta el final y salían uno tras otro de la línea de producción con una modificación mínima una insignia redonda que decía IES en lugar de Citröen.
Por un buen tiempo, mientras seguían saliendo Citröen 3CV de la línea de producción con la insignia de IES sucedió algo muy curioso: A sabiendas que la fábrica seguía siendo la misma incluso con los mismos operarios la insignia IES era símbolo de que ese 3CV era nuevo.
Más de uno renunció al doble chevrón para estamparle la insignia de IES y simular que su unidad era de factura reciente, considerando que el auto era exactamente el mismo y no tuvo cambios en más de una década el disfraz quedaba perfecto.
Años mas tarde seguirían el camino inverso, los propietarios de IES pasarían a lucir el doble chevrón.
Es que para los 80s, los rivales del 3CV como el Fiat 600 o el Renault 4 se estaban despidiendo, primero se fué el 600, el Renault 4 se quedó un poco más pero con algunos aditamentos plásticos que lo mantenían vigente a la moda del momento.
Los plásticos mostraban el camino de la supervivencia en los 80s y así como muchos clásicos de otras marcas, IES tomó el 3CV y lo "actualizó" con nuevas ópticas, tablero de instrumentos, butacas y luces traseras. El auto lucía bien pero no dejaba de ser el 3CV de siempre, se lo llamó IES América.
En el 87 el cambio llegó más lejos, luego de que visualmente no se podía desarrollar más el auto, ahora ofrecía las mejoras que prometía su nuevo aspecto: Así se renunció al chasis y esquema de suspensión originales por un chasis tubular y cuatro amortiguadores dispuestos de forma tradicional que le daban mayor rigidez y tenida.
Además se le añadió encendido electrónico, nuevo tablero plástico que llegaba de lado a lado, mayor cilindrada... Pero lo más radical fué ponerle la caja de cambios al piso y un sistema de tarjeta electrónica para ponerlo en marcha.
Pareciera una lista de aditamentos infinitos y es que el 3CV en su estado natural casi nada ofrecía, sólo llevar una persona de un lado a otro y pretegerlo de los elementos dentro de lo posible.
Tantos aditamentos lo alejaron de su concepto original, sin embargo recibió comentarios elogiosos, considerando el origen del auto y sus limitaciones, el IES Super América fué la última gota de jugo que se le sacó a ese auto por demás obsoleto para los 80s.
El IES Super América supone el "Todo o Nada" de IES, de su éxito dependía su futuro ya que el siguiente paso sería abandonar definitivamente el 3CV. Al final fue nada, el Super América se vendía pero no tanto como se esperaba, coincidiendo con una crisis económica a fines de los 80s, no quedó nada para un nuevo intento.
El Modelo.
El modelo tiene una parte heredada como el auto real, la carrocería sigue siendo la misma y para el modelo los piezas de los 2CVs existentes resulta en principio práctico.
Pero es en los detalles que supone su complejidad, reclama toda una gama de nuevos insertos como paragolpes, parrilla delantera y la totalidad de las ópticas, tanto traseras como delanteras.
Las ópticas delanteras no son para principiantes, llegar con líneas rectas sobre una base curva del guardabarros delantero no da margen de error, al mínimo error la óptica queda mirando para cualquier lado.
Óptica que está resuelta en tres elementos: carcaza roja, elemento reflectante y otro traslúcido que termina de darle la apariencia correcta.
La unidad recibida tenía un problema de encastre en una de las mismas que debió ser reparado con paciencia y con suerte debido a que el transparente tenía las espigas de encastre anchas y quedaba fuera de lugar.
Una vista posterior de la óptica nos da una idea de su delicadeza y la fuerza que tenían en el diseño para romper con el tradicional faro redondo con forma de bala.
También se puede apreciar el espejo retrovisor negro, parece una añadidura de usuario pero en realidad en los 80s esos espejos negros eran el equipamiento del auto.
Cuestiones de estética, hasta los 70s todo era metal cromado y en los 80s todo intentaba ser plástico y negro: Nótese como el paragolpes delantero de chapa se lo pintaba de negro mate para simular plástico, ya sin esas enormes barandas cromadas que lucía el 3CV años anteriores.
El escape en tono gris, una delicadeza que no se aprecia a simple vista ya que no asoma debajo del paragolpes trasero.
Es que el modelo no es inédito, viene incorporado de otra colección europea dedicada a los 2CVs y sus variantes. Lo que sería una suerte ya que son de mejor calidad.
Bueno, no mucha más calidad, también tuve que enderezar una óptica trasera pegada de forma inclinada.
A éste punto uno ya empieza a sospechar de las burbujas y sus formas que no permiten ver el modelo del todo bien antes de comprarlo, se trata de revisar hasta cierto punto y luego esta en la buena fortuna de cada uno el resultado final.
Sacando las ópticas del cuadro nos quedamos con las tampos, el logo de IES en la parte posterior esta mejor ejecutado que el delantero y da gusto mostrarlo, es nítido, es claro, es IES.
El parabrisas del 3CV al igual que el 2CV no es una invitación al éxtasis del diseñador, escueto y plano lo único que se pretendía es que esté limpio y no se rompa. Los limpiaparabrisas de tamaño acorde y el detalle del ventilete con una larga bisagra de piano cromado luce de maravillas.
La lona del techo cumple bastante, se le ven las nervaduras y da aspecto efectivo de lona.
Ví reproducciones de este techo tremendamente lisas e insulsas, también vi mejores que ésta. Para el modelo esta más que bien.
Las ruedas resultaron oportunas, un tono alto de brillo para mi gusto, podría haberlas "ensuciado" pero en realidad lo que se busca es un tono más gris y menos plateado. Ensuciarlas da una terminación plateado sucio.
De paso se puede apreciar las luces de giro delanteras, modestas pero prolijas.
El listón negro de la puerta y los añejos picaportes asomando como brotes de un árbol que se intenta tapar.
Es que el IES 3CV nunca descubrió nada, es un heredero de un diseño y ofrecía mejoras del mismo, detalle aquí... detalle allá... pero seguía siendo un Citröen.
Curiosamente otros productos de IES muy interesantes como el utilitario IES Gringa cuya carrocería era inédita y moderna no tuvo el éxito esperado, a muchos les gustaba pero no todos terminaban comprándola.
Vender 3CV hasta morir, ese parecía el destino.
Magníficent IES América!
Eduardo Sal Lari.... tipo interesante si los hay. Escucharlo hablar sobre IES, es una experiencia muy interesante (hay un par de videos por ahi de una cena en el club Citroneros de Lomas de Zamora). Y se que hay un libro con la historia de IES ya casi terminado, y buscando como publicarse, escrito por quien considero que es el mayor especialista en la marca y su historia (y poseedor de una Gringa impecable). Yendo al modelo, tan bien descripto en la entrada, que decir. COmo fanatico del 2CV que soy, lomanhele desde siempre. Tan pronto salio en la coleccion Eurpoea, lo compre. Pero eran las epocas del benemerito Moreno, y el auto jamas llego a mis manos (y tampoco el reintegro del importe oblado, hay que decir que los que sacaron esa coleccion, que hoy ya no existen, no eran del todo trigo limpio). Cuando empezaron a salir los inolvidables, un conocido en comun, que habita los pagos de Lanus, me comento que se habia enterado que este modelo saldria. asi que estuve alrededor de año y medio esperandolo, hasta que finalmente llego a mis manos. y la verdad, la espera valio la pena. Lo unico que lamente, es que no tuviera la trompa desmontable, como el 3CV de la misma coleccion, ya que de esa forma seria muy facil armar un Prestige. Pero estoy mas que feliz con este modelo, y la nota le hace todos los honores. Saludos!
ResponderEliminarPuedo apostar que Sal Lari vivió una experiencia enriquecedora, todos esos años debieron ser muy intensos.
EliminarNo entiendo bien, usted pretendía pasar de un America a un Prestige?
A mi también me gustaría tener un 3CV Prestige porque ese fue mi primer auto (y primer 0 Km, rojo, mod. '75).
EliminarSi Salvat no lo saca se podría pensar en tener uno por modificación pero me parece que lo más fácil es tomar un 3CV y con masilla y lima transformar el final del toldo y la tapa del baúl en el portón alto del Prestige. Lo demás creo que es todo igual al 3CV anterior (paragolpes, faros parilla,etc.).
Un detalle a agregar son los faldones barreros a los guardabarros delanteros que Citroen proveía de fábrica.
Saludos
Mario
Mirando las fotos con macro descubri algo....Salvat me la dejo mucho mas facil de lo que creia....
EliminarUn cambio de ópticas?
Eliminarcambio de portones....se desarman!!!
EliminarCaramba! Que detalle!
EliminarNo desarmé los modelos pero mirando con la lupa se nota que los portones son piezas separadas!
EliminarEntonces las opciones son dos:
Tomar un 3CV, quitar la tapa de baúl y el techo y reemplazarlos con los de un IES que habría que descartar.
Desarmar el portón de un IES y hacer una copia por algún sistema de moldeo que no la dañe o hacer en scratch un portón nuevo y colocarlo en el 3CV previo recortado de la parte posterior del toldo. De esta manera se tendría un Prestige usando únicamente un modelo de 3CV.
Saludos
Mario
Puede hacer un Prestige y con el "cascaron" del IES le saca los faros y hace una novedosa versión de carrera que recuerdo ver por TV que corrían sin los mismos... era algo entretenido de ver sin lugar a dudas.
EliminarHace un tiempo leí en Ruedas Clásicas la epopeya ede IES, le aseguro que el Ingeniero era un fuera de serie, comercialmente hablando.
ResponderEliminarSi bien los cambios aplicados al 3CV fueron mínimos, puedo asegurar que fueron muchos, sobre todo considerando el tamaño de la empresa.
Y creo que definitivamente lo pueden acreditar como Argentino (al IES, no al Ingeniero, no tengo presente la nacionalidad del Ingeniero).
El modelo está lindo, una sencilla copia de un modelo sencillo, con todo lo bueno exigible en estos tiempos tan contemporáneos, quizás más digno embajador de diecast argentino que el mismo Torino.
Sólo revisaría las ruedas que -al menos en las fotos- se ven las llantas sobresaliendo más allá de los angostos cauchos.
No considero mínimo bajar los cambios al piso a un 3cv, lo curioso es que demostraba que era posible y nos deja la pregunta sobre la insistencia de Citröen por usar ese sistema de cambios por tantos años.
EliminarEs crrecto su comentario, al decir "mínimo" quise decir en el aspecto estético.
EliminarY fíjese que justamente les pondero el mérito, tratándose de una modesta empresa local.
No sabía que jabía salidos este modelo.
ResponderEliminargran reseña y review como siempre.
saludos!
A buscarlo!
EliminarUna ranita venenosa y cordobesa! Correctísimo modelo.
ResponderEliminarSi tuviera que criticar algo, sería que las llantas sean ciegas en vez de traer agujeros como en el M28.
Saludos.
Si, les falta ese detalle, por suerte no se nota mucho.
Eliminarestaba viendo lo mismo, tendrían que haber usado las del ami 8 elysée
EliminarBuenas Cabo! Muy buena reseña como siempre, una leyenda el Citroen... Y sí, es una pena que no hubieran querido traer los Citroen más modernos y por eso cuando volvieron en los 90 con el Xsara y demás, la gente les tenía idea. En cuanto al modelo ay ay ay... esas ópticas delanteras... en mi caso tuve que sacar ambas con muuucho cuidado y luego volver a posicionarlas. No solo estaban torcidas lateralmente, sino que una apuntaba hacia abajo y la otra hacia arriba. Una óptica trasera también vino medio torcida pero esa no la pude sacar, vi riesgo de rotura y la dejé así... El resto del modelo zafa razonablemente bien... Al menos variaron el color! Abrazo.
ResponderEliminarSe ve que es un error recurrente el de las ópticas, yo me animé a las traseras ya que la inclinación era de 45 grados y no había ojos con que mirarla.
EliminarA la vista quedó bien pero con el macro se nota que esta intervenido el modelo.
El color es representativo del auto, fué el mas común, pero no es para elogio, el modelo de la colección europea es rojo... Este también... Fue un transplante.
Es un modelo que a simple vista nos atrae por lo novedoso, pero se quedaron a medio camino con algunas cosas, digo a medio camino porque es una mezcla de America y su posterior Super America. El primero era nada más que un 3CV maquillado en faros tanto traseros como delanteros, el resto idéntico. Aquí en el modelo tenemos palanca al piso, escape hasta el paragolpe, y otro tablero (todo esto de Super America), mientras que el parabrisas sigue siendo del que pretende ser, con el agregado que las llantas ciegas no eran tales en ninguno de los dos, debería traer las perforadas como en los últimos M28 y el conocido Ami 8 Elysee. Esto último es lo que en definitiva más se nota, puesto que lo otro en el interior apenas se aprecia por las habituales transparencias y el color negro que domina todo.
ResponderEliminarHabría que sacrificar ruedas de algun Ami de la colección en pos de tener algo más fidedigno, y de paso repintando hacer otro Ami mas viejo con ruedas ciegas.
PD al mío también tuve que retocarle las luces traseras, muy desprolijas, me hicieron acordar al R18 de tan ordinarias, con rebabas y exceso de pegamento.
Si, yo creo que debería tener tampo de Super America y listo, total ya tiene la caja al piso.
EliminarYo tengo un les súper América 1986 y me gustaría decirle a salari porque carajos cambio el chasis si el tubular del les te complica la vida y vivis rompiendo palieres clarísimos se barren por el sistema de frenos que es una total porquería nunca pude usar este les que tengo se que se animo a innovar pero no se hasta donde porque la ultima versión no llega de una ciudad a otra sin romperse antes y el que diga lo contrario que veng y averigüe por si mismo
ResponderEliminaruno de mis autos favoritos de todos los tiempos
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