Si preguntan por mi colección, debo decir incompleta, felizmente incompleta, si un día se completa no podría coleccionar más.
Conjugando modelos de factoría reciente y no tan nuevos, hasta llegar a antiguos con más de 50 años, vamos a repasar los autos que circularon por nuestras calles entre los años 1950 hasta entrados los 80´s, un legado humilde para quien me siga, o simplemente ir dejando huella...

lunes, 20 de junio de 2016

Messerschmitt KR200 (1955) Vitesse 1:43


A trazos anchos se pueden separar tres modelos de Messerschmitt, el KR 175 que era impulsado por un motor sachs de 175 cm3 y 9CV, es decir, la versión original y presentada en 1953.
Le siguió el modelo que vemos con un motor de 198 cm3 y 10CV de potencia con una velocidad máxima de 90 km/h. Ambos vehículos declaraban un peso aproximado a los 210kg.
El lector asiduo de la página sabe que no soy de recurrir a los números y tablas de especificaciones, ya que para autos citadinos dichos parámetros resultan inadecuados a mi criterio: Que un sedan de una marca haga velocidad tope de 160 km/h y la competencia 163 km/h resulta irrelevante.
Del mismo modo me resulta fútil la precisión de relojero para el consumo de combustible, si al final, el fabricante no sabe cuanto pesa mi suegra, mi señora y mucho menos cuanto peso yo cuando subo a la ruta. Se busca en cambio cierta noción, es gastador o no, es resistente o no, que tan durable es...


Pero nos topamos con un momento especial: Qué pasa cuando los números se aproximan a cero?
Vértigo! Eso es lo que pasa! Ya no tenemos un vehículo de 900 kg promedio sino uno de 210 kg, neumáticos raquíticos, un motor propio de motocicleta... y de motocicleta modesta! Ni hablamos de cuantos litros tiene el motor, ya que no llega a 1/4 de litro.
Números que llaman a revisarse ya que uno empieza a dudar: Va a funcionar?
Es como el medidor de combustible cuando marca reserva y ni miras de llegar al próximo pueblo, mirás la ruta, mirás el reloj, mirás la ruta, mirás el reloj...


De la misma forma, uno mira el modelo y mira los números y vuelve a mirar el modelo... de pronto aquellos insuficientes 90 km/h para el gusto actual resultan escandalosos cuando no suicidas atendiendo a los neumaticos no mucho mas sofisticados o iguales a los de una Siambretta.
Sin contar que no hablamos del tercer modelo, el TG500 que superaba los 110 km/h. La cuestión es que tantas veces se los presenta como austeros (en efecto lo son), se los presenta como simpáticos, son indiscutiblemente simpáticos (distan muy poco de vehículo de circo). Pero tanta simpatía oculta el lado temerario que en los números existe.


Plexiglás arriba! la ubicacion en tándem de los pasajeros, la altura mínima y la suspensión que se adivina rígida hace pensar de cada viaje una aventura. Inimaginable en caminos de tierra. Sin paragolpes para doblar la apuesta. Único requisito: Saco y Corbata.


Entoces tenemos los modelos KR175, KR200 y TG500, Los números indican la cilindrada, KR viene de "Kabinenroller" que si se lo traduce del alemán sería "coche burbuja" o "cabina rodante" atendiendo a la similitud con la cabina de un avión. el TG500 en que cambia? en que éste tenía 4 ruedas, llamado el TIGER 500 tomando de su nombre las siglas TG. Lo pueden ver aqui.
Sobre esas tres bases se ofrecieron con techo fijo, removible y de lona estilo cabrio, siendo las variables escusas de algunos coleccionistas para tener mas de uno.

Si no les conté el modelo es raquítico y muy difícil de fotografiar, si ve algo borrosa la próxima foto es por que esta emocionado...


Magníficent Messerschmitt KR200!!!

sábado, 4 de junio de 2016

Fiat Duna Weekend (1992)- PCT 1:43


No creo que algún purista de Ferrari sea un asiduo visitante, tampoco uno que se dedique a la F1. Como si fuera poco hoy me pongo extremadamente mundano, barrial, casi diría irrelevante para los elitistas. Es que pasaron los años y el título de "auto común" donde se pensaba en varios autos hoy tiene al Fiat Duna como el arquetipo de dicha categoría.
Al punto que cualquier sudamericano conoce al Fiat Duna y la idea es un auto común, y si hablamos del Fiat Duna Weekend pues es un auto común rural.


Pero entiéndase bien, ser común es ser compartido, repetido y duradero en términos automovilísticos, es decir, si no se es buen auto, nunca se llega a ser común. El Duna fue bueno, barato... y hasta algunos lo vieron bonito.
Es un auto que escapa a los parámetros en los que se valora en vehículo: ¿Qué puede decir una revista especializada si en la cuadra hay uno que lo tiene impecable, otro que prueba su velocidad máxima todos los días y otro que trata de gastar lo menos en combustible? Sin contar el que lo arregla él mismo... Y los elogios para este auto serían algo de no acabar hasta que usted piense que tengo uno.


Ya sospecha que tengo uno, por que sólo quien tiene un Duna sabe lo que es un Duna, quizás Usted tenga un Duna y me esté leyendo con los ojos llenos de lágrimas, emocionado por que es una férrea declaración de principios... De lo que significa tener un Duna!
Escribir para un público variado... O escribir públicamente se hace teniendo en cuenta cuestiones impensadas, la más curiosa es que el lector generalmente piensa que uno, el que escribe, es semejante, un suerte de proceso de sentirse identificado, forzando similitudes que van mas allá de las coincidencias reales... 


Por que todos tuvimos un auto que fue más que un medio de transporte, fué un compañero y el Duna fué compañero de muchos. La weekend en especial era la compañera viajera incansable.

Es más! Usted mientras leía pensaba "es cierto me paso mil veces!" pensando en sus veces de escritor. No se sorprenda pero... cuando se lee algo sesudo y revelador se lo apropia de tal forma que parece que fuera uno el que lo descubrió... ese es otra cuestión a tener en cuenta.


Desde su concepción era carta ganadora, heredaba todo de la versión sedán y sumaba capacidad de carga otorgando mayor versatilidad, no en vano fué en su segmento la más vendida.
Tengo otras tantas recomendaciones para compartir así cuando escriben  hacen delicias de lectores ávidos que pululan por la red. Usted cree que las voy a dar, por que ese es otro punto: El lector cree que una persona que escribe le va a ayudar o tiene el compromiso de hacerlo.

 
El modelo que se aprecia fue esperado por muchos años, gracias a una colección oriunda de Brasil podemos tenerlo. Un hito de la historia automotriz argentina en la vitrina, aunque la miniatura fué pensada para reproducir al Fiat Elba, salvando el nombre, para cualquier argentino es un Duna.

Imagine cuántos recursos "ocultos" hay para quien escribe, todo ese poder exige responsablidad. Tanto poder y yo del lado oscuro! Muchas veces me han comentado: "Usted escribe mucho, pero lo extraño es que lo leo todo y a mi no me gusta leer". 


 El modelo aparentemente fue ejecutado por PCT (no esta firmado) tiene una calidad similar a IXO pero considero que al existir otros modelos que si estan firmados por PCT dentro de la colección es muy probable que éste también lo sea, es muy raro que Altaya arme una colección recurriendo a dos fabricantes.
 Otros dijeron "Ahhh es Usted..." y se puede sentir en el silencio que sigue como van corrigiendo todo los supuestos sobre mi persona. Por empezar, no tengo un Fiat Duna, tampoco soy bonito...


Poco importa todo cuando se tiene el mérito de ser el primero en reproducir el Duna Weekend, el único en hacerlo, no se puede hablar de mejor o peor, no se puede comparar con otro que lo haga también... Simplemente de dice gracias si uno lo esperaba.
Hoy no sólo escribo mucho sino que me doy el lujo de hacerlos imaginar de cuantas formas me habrán imaginado los lectores en estos 5 años que llevo "online": desde algo cercano a un burro serrano a un exquisito historiador, el abanico es grande y la desilusión permanente...


En resumen, de un gran auto un gran modelo, perfeccionable para los de paladar negro, pero más que digno teniendo en cuenta que para ser un Duna, nada le falta. Ojalá sigan saliendo este tipo de modelos, para muchos resultan hasta necesarios.
Incluso me imaginaron arriba de un Duna Weekend, con gusto a barrio, en cuadras de casas bajas y esquinas grandes...


Magníficen Fiat Duna Weekend!
El remate es como siempre.